Valores Familiares

Entre los miembros de una familia se establecen relaciones personales que entrañan afinidad de sentimientos, de afectos e intereses que se basan en el respeto mutuo de las personas.

Los   valores son principios que nos permiten  orientar nuestro comportamiento en función de realizarnos como personas. Son creencias fundamentales que nos ayudan a preferir, apreciar y elegir una cosa  en lugar de otra.

La familia es la comunidad donde desde la infancia se nos enseñan los valores y el adecuado uso de la libertad. Las relaciones personales y la estabilidad familiar son los fundamentos de la libertad, de la seguridad, de la fraternidad en el seno de la sociedad.   

Pero ahora hemos caído   en una gran crisis  con respecto  a nuestros valores   todos se  están o se han perdido  dentro de  nuestros hogares. 

Nuestros Valores

Falta de Respeto entre Padres e Hijos

Los tiempos han cambiado, ya que antes las personas tenían que hablar de usted a sus padres, que en aquella época eran la primera figura de autoridad y respeto para los hijos.

Los hijos han perdido el respeto por los padres, la relación que existe hoy día entre padres e hijos ya no es igual que antes. Se ha perdido el respeto por los padres y por la familia ahora los hijos hacen absolutamente lo que quieren y dominan a sus padres.

Muchos  padres piensan en darles a sus hijos todo lo que ellos no tuvieron y piensan en dar cosas materiales para llenar la ausencia de ellos, el tiempo que no pasan con los hijos, porque ahora la mayoría de los padres trabajan. La mayor parte de culpa que los hijos sean desobedientes he irrespetuosos es de los propios padres, que consienten demasiado a los hijos, los jóvenes de hoy se califican como distintos, y acostumbrados a otros patrones de comportamientos y de estilos de vida.

Un padre, antes, aspiraba a ser respetado por sus hijos. Cuando el padre hablaba el hijo debía callar. El valor se llamaba “respeto”. Hoy en día los padres buscan más bien ser queridos por los nuestros hijos. Cuando hablamos queremos que se nos responda, no pretendemos silencio por parte de nuestros hijos, queremos dialogar. El valor respeto ha sido suplantado.


En ésta foto vemos como el niño le ésta gritando a su mamá.

DISTINTOS TIEMPOS AQUELLOS.

Mi madre solo me miraba una vez para darme la instrucción de: eso no se toca, eso no se hace y eso bastaba para que yo la siguiera. Su dedicación y amor incondicional me ayudaron a crecer en un ambiente de amor, y respeto. Es por esto que a veces pienso y me pregunto en ¿Que mundo vivimos? Vemos a diario como la juventud se va perdiendo entre las drogas y la vida fácil, sumado a: YO primero, YO segundo y YO tercero. Hoy día no existe el respeto por nada ni nadie. Personalmente pienso que existen dos razones para ello: (1) la falta de interés de los padres por la crianza de sus hijos, entiéndase, el compartir con ellos, la enseñanza de valores morales y sociales y la enseñanza de las herramientas esenciales para poder vivir una vida productiva y feliz. A esto hay que sumarle que (2) esta generación que se levanta es una que le presta poca importancia al futuro y solo viven el presente, a su manera, Donde el mundo solo gira a su alrededor, YO, YO y YO.

Perdimos el valor Religioso

Pérdida de valores religiosos


No te gustaría que alguien te mostrase, la evidencia de la existencia de Dios? Sin forzar ni frases como "solo tienes que creer". Bien, aquí presentaremos honestamente algunas de las razones que sostienen que Dios existe.

Cuando se refiere a la existencia de Dios, la Biblia dice que hay personas que han visto suficiente evidencia, pero que ellos han suprimido la verdad acerca de Dios.1 En cambio, para aquellos que quieren saber si Dios está allí, Él dice, "Me buscarán y me encontrarán, cuando me busquen de todo corazón". 2 Antes de ver los hechos que manifiestan la existencia de Dios, pregúntate, "¿Si Dios existe, quisiera conocerlo?" Aquí entonces, están algunas razones a considerar..

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Áqui vemos como nuestros abuelos aún nos dan ejemplo.

Los valores religiosos para mí son la herencia que la vida y la familia nos brindan para ser alguien con principios y formas de ser particulares de cada ser humano. Lamentablemente estos valores se han perdido dentro de los hogares ahora las personas se olvidan de Dios, los padres se han olvidado de inculcarles a los Hijos el respeto a Dios, se les olvida enseñarles a los hijos dar un GRACIAS A DIOS por algún logro obtenido, u orar antes de acostarse, antes de comer, cuando se levantan. Múchas veces los padres no enseñan porque ni siquiera ellos lo hacen, no tienen ese habito, no leen la biblia ahora los hogares son un caos, no hay en ellos valores cristianos.

¿Porque será que nos olvidamos de Dios?

En esta vida, debido a las distracciónes del mundo y de la carne, muchas veces tendemos a olvidarnos de Dios y de las enormes bendiciones y milagros que ha hecho en nuestras vidas.

Fácilmente nuestra humanidad nos lleva a dejar como prioridad a Dios y a olvidar sus beneficios y bondades.

Por lo general nos olvidamos de Dios cuando estamos conformes con nuestras vidas y nos declaramos “felices” o cuando nos desilusionamos porque no nos cumplió algún capricho.

¿Podrían ser las posesiones?
 
Esta imagen nos muestra cómo, posiblemente sea el dinero lo que nos impide desarrollar este valor.


No es malo que alguien tenga bienes materiales. Lo que sí quiere decir es que debemos tener la actitud corrécta ante las posesiones. ¿Cuál es esa actitud? La de reconocer que todo le pertenece a Dios, que Él es el proveedor y todo es suyo.

Muchas veces confíamos más en las posesiones, que tenemos que en Dios y es ese el motivo por el cual no le dedicamos tiempo a Dios, El hecho es que mientras más posesiones tenemos más nos encontramos plagados con preocupaciónes. Nos preocupamos más y nos dedicamos más por la mantención y la seguridad de nuestras posiciones.



La falta de unidad

La unidad se cónstruye a partir de una visión compartida, una esperanza anhelada, un fin altruista o una causa para el bien común. La unidad da sustento, fuerza y valor para hacer que lo imposible se haga posible. Junto con la determinación y el compromiso, la unidad hace que la tarea más difícil parezca fácil.

La estabilidad de la unidad proviene del espíritu de igualdad e identidad, de los valores nobles personificados en los principios universales fundamentales. La grandeza de la unidad es que se respeta a todos. La unidad crea la experiencia de cooperación, aumenta el fervor y el entusiasmo por la tarea y hace que el ambiente sea poderoso y facilitador.


Las principales causas por las que nos alejamos de algún miembro de la familia. Una muestra de descortesía, puede causar una ruptura con algún miembro de la familia.
Interrumpir a los demás, si están tratando de exponer o aclarar algún problema debes esperar tú turno y no mostrarte molesto por esta situación.
Criticar de forma destructiva, resérvate malos comentarios si quieres decir tú opinión hazlo lo más prudente que puedas.
Querer controlar, cada quien tiene gustos diferentes y actividades distintas.
Cuidar los detalles, no te molestes por cosas que puedes solucionar.
Ser agresivo, controla tus impulsos lo más que puedas, recuerda que tienes que convivir diariamente con tú familia.

Ofender e insultar, nunca lo hagas la violencia desata más violencia.

Aquí vemos la realidad, como algunas familias viven discutiendo.

Ver a tus hermanos como enemigos, ésto trae como consecuencias grandes conflictos y una madre o un padre no se puede hacer al lado de uno por que los dos son sus hijos.
Ser inmaduro, no reconocer nuestros erróres y culpar siempre al otro, acépta tú error y réctifica, colabora con mantener a la familia unida.
Para crear unidad en el mundo hay que comenzar por cambiar la conciencia de si mismo y vamos a empezar a ver la gran diferencia.

¿Posible causa de la falta de unidad?

Tal vez porque los padres no tratan a sus hijos como seres de aportaciones, como personas que pueden dar algo, sino como seres de necesidades, dándoles muchos bienes materiales que no siempre les hacen falta y privándolos de cooperar y de comunicar sus iniciativas.

AquÍ vemos como la niña está alejada al ver como los padres están discutiendo.

Impedir a una persona el desarrollo de su capacidad de aportar, de darse dando, es una privación grave, peor que la de carecer de otras cosas.

Se perdieron nuestras tradiciones y costumbres

El valor a las costumbres y tradiciones.
A pesar de no tener nuestras raíces "debidamente marcadas", debemos recordar que la cultura encierra no sólo aspectos artísticos; sino, todo aquello que es parte de nuestra vida cotidiana.

Debemos saber que El Salvador se vé, cada vez más influenciado por culturas extranjeras, que de hecho, no se asemejan en nada a nuestras tradiciónes. Podemos ver por ejemplo, que la vestimenta es muy particular en nosotros.
 

 
















Otras culturas han invadido a nuestros jóvenes.
 
Es decír, utilizamos estilos de culturas europeas o nortéamericanas. Así, pues, vamos deteriorando póco a póco nuestras raíces cúlturales. 
Nuestros abuelos crecieron con costumbres y tradiciones, éstas han sido la esencia de su cúltura, es decír tenémos orígenes buenos, lamentablemente. Éstos valores se han pérdido ahora ya no se ponen en práctica.


Aquí podemos ver como son nuestras verdaderas costumbres, nuestras ropas elegantes.
 
Ahóra a los jóvenes ya no les importan estas cúlturas los vestídos de manta bordados, los zapatos de tusa, también aquella música flor clórica, las cumbias, aquellos bailes tranquilos decentes todo ha cambiado. Porque ahóra todo es moda, todo por compléto es diferente, ya no se pueden ver las buenas costumbres y tradiciónes que deberíamos haber adoptado de nuestros padres  un valor más q se ha perdido dentro de los hogares.

Por otra parte, porque siento chocante el desinterés que presentan los adultos activos, y
los jóvenes principalmente, a sus raíces; la transición de dicha cultura no se logra por la
influencia de las corrientes "liberales" de la nueva éra, ésta cúltura de sobrevivír opaca indiscutibleménte nuestra cúltura original; los padres enseñan a sús hijos cómo ganar dinero, ganarse la vida, más no les enseñan a conocerse, ya que no le ven  frutos a ésto ni siquiera en la eventualidad.

La cúltura lléga a situarse en una posición de jaque por las corrientes de valorización de lo material de la nueva era. Es por ende, que el tema me parece interesante, mostrar que por la pérdida de algo que podría parecer innecesario, como lo es la cultura, podamos empezar el decaimiento de un país, en este caso El Salvador, que por pérdida de identidad, podría dejar de existir por culpa de una fascinación hacia otra cúltura. Me parece nefasto el hecho de dejar de ser lo que uno es, o dejar de pertenecer a lo que uno pertenece, más que todo a nivél de núestra identidad cúltural, sería como ser parásitos de otras cúlturas, cúlturas que podríamos utilizar simplemente para enriquecer nuestros horizóntes  Intelectuales.

Ya nadie es Responsable

La responsabilidad:

Ésta es una pregúnta para todos. ¿Quiénes somos responsables?

Ahóra ya nadie se hace responsable de sus actos dentro de los hogares, ya nadie quiere colaborar con las responsabilidades de la casa, los hijos le dejamos toda la responsabilidad a mamá, que mamá agá lo uno, que mamá agá lo otro, los hijos ya ni siquiera ordenan su cuarto, el mismo es como la lavandería trapos por todas partes, nadie ordena la cama cuando se levanta todo lo hace mamá o la muchacha, y eso muchas veces es irresponsabilidad de los padres pórque mucho consienten a los hijos, no le enseñan hacer responsables y ser dueños de sus actos y enseñarles. Dejarlos que aprendan de las consecuéncias de sus áctos pero muchas veces esa falta de enseñanza por parte de los padres repercute en los hogares y en el futuro de los hijos.

Ojo no solo las responsabilidades están dentro del entorno del hogar, las responsabilidades las tenemos afuera de casa, con nuestros vecinos, con nuestros amigos, con la sociedad, etc. También con ellos debemos ser responsables.
Pero eso se ésta perdiendo ya no somos responsables en casa, así que tampoco lo queremos ser afuera.
Hoy en día los jóvenes raramente somos responsables de nuestros actos.


¿Pero porque? 
 Porque somos demasiados liberales nos creemos que nadie nos manda y que ya estamos demasiados grandecitos para que nos anden mandando. Así que como no quiero que me manden mejor nos alejamos y así ya no tenemos responsabilidades.

 

solo miren este tiradero nadie quiere ayudar a mama a recogerlo.